Ocupación Haitiana
Los movimientos surgidos antes y después de la proclamación de independencia de Nuñez de Caceres en el Cibao y la zona suroccidental tuvieron por propósito principal pedir la incorporación del país a la República de Haiti.
En esto se paso el presidente Jean Pierre Boyer para proceder a la ocupación y a la incorporación de la parte española a la unificada República Haitiana. El mismo Nuñez de Caceres proclamo la República de Haiti en la ciudad de Santo Domingo desmantelando por si mismo al llamado Estado Independiente de Haiti Español, con apenas unas cinco semanas de existencia.
En Santo Domingo no se le hizo resistencia a los haitianos en 1822, tal como sucediera en 1801 y 1805, por varias razones. Sin duda alguna las mas importante es que apoyando la incorporación a Haiti los sectores mas importantes de la población e incluso de las clases dominantes de las regiones Norte y suroccidental, se encontró aislado en la ciudad de Santo Domingo.
Esta decadencia provoco una agudización de la lucha de clases, lo que preparo la perdida del control político de la aristocracia colonial y el auge de la lucha de los grupos explotados que orientaron sus perspectivas sociales en ese momento hacia la unión con Haiti.
De manera que este movimiento tuvo un carácter precipitado a pesar de haber sido concebido con mucha anterioridad. La otra parte tiene que ver con los ideales expansionistas de Haiti, que al resolver sus problemas internos, se encontró con un poderío económico y militar excepcional.
Las promesas de Boyer en cuanto a otorgarles tierras a la población contribuyo a que su propuesta ganara respaldo en el Haiti Español, como también lo hizo con los esclavos negros de liberarlos y entregarles tierras.
La unificación política de la isla se llevo a cabo con la aprobación de la mayoría de los dominicanos, ya que estos, a juzgar por las correspondencias con Boyer, creían que la unión les daría libertad, seguridad y bienestar económico.
Boyer por su parte, alego siempre que fue llamado por los dominicanos y que la unificación entre la parte Este y Oeste fue para impedir que una nación esclavista se apoderara de la segunda parte y pusiera en peligro la primera.
Sistema de Ocupación Haitiana
Las aspiraciones expansionistas de la naciente clase dominante haitiana y de sus jefes políticos sin duda, fueron el factor mas importante en la nueva situación creada, pero no menos cierto es que sin el apoyo durante un largo periodo de gran parte sino de la mayoría de la población dominicana, la ocupación haitiana no hubiese tenido las características históricas que asumió por múltiples razones.
Durante la ocupación haitiana los dominicanos no formaban un Estado independiente pero eran nación dominaba dentro de un Estado independiente y contrariamente a como afirma la historiografía tradicional no es cierto que los haitianos se hicieron de grandes propiedades, esto solo sucedió con los oficiales y funcionarios destacados de la parte Este.
Boyer al tomar posesión de la parte Este de la Isla dispuso una series de medidas tendentes a cambiar la situación imperante, como fue la abolición de la esclavitud, lo que beneficio a unos nueve mil esclavos, pero al mismo tiempo, los obligo a permanecer en las parcelas, para que trabajaran la tierra de los esclavistas, tratando así de conciliar intereses.
Otra medida lo fue la internacionalización de los mecanismos jurídicos y políticos que regirían la vida del país, notablemente su división en diversas unidades, la representatividad de las poblaciones por electores en diversos niveles y la puesta en vigencia del Código Civil francés.
A partir de Boyer la tierra dejo de ser un monopolio de la clase dominante para aprovechar el plusproducto generado por los productores directos, fueran libres o esclavos. Boyer creo las bases del sistema agrario que todavía en nuestros dias mantiene gran importancia.
Boyer desplego una ofensiva bastante consistente contra el predominio económico de los hateros y contra el sistema de la ganadería extensiva, sentando las bases de un desarrollo agrícola muy superior al que hasta entonces existía.
De ahí que el periodo haitiano en su primera parte fuera además un periodo de cambios sociales e institucionales, un periodo de notable crecimiento económico. Durante la ocupación haitiana, consolidaron las nuevas relaciones de producción que se venían gestando desde el siglo XVIII.
Se pueden designar las nuevas relaciones como de pequeña propiedad mercantil precapitalista, y fueron dominantes en general durante el transcurso del siglo XIX.
Fue con la ocupación haitiana que el nuevo modo de producción se hace plenamente dominante, a liquidarse la esclavitud, repartirse tierras a quienes no la tuviesen, liquidarse lo fundamental de las rentas feudales, limitarse sensiblemente al poder social y político de los hateros y fomentarse el desarrollo de la agricultura.
La crisis crónica del modelo se basaba en el hecho de que los pequeños campesinos no tenían ni medios ni interés en desarrollar renglones mercantiles regulares, ya que no tenían recursos de mano de obra, técnicos, financieros, etc.
Se veían explotados por los comerciantes, razón por la cual producían para el mercado lo imprescindible para procurarse algunos artículos manufacturados provenientes del exterior.
La ausencia de una clase dominante agraria moderna y la fragmentación de la propiedad junto a la rusticidad tecnológica, causaron la inexistencia del mercado interno y una pobreza crónica generalizada.
El Código Agrario de Boyer, que fue copiado del código napoleónico, fue puesto en vigencia en Haiti en 1821 y tuvo como propósito asegurar la mano de obra a los grandes y medianos propietarios, ya que impedía a los campesinos abandonar los predios donde laboraban, lo que fue rechazado tanto por los trabajadores haitianos, como por los dominicanos.
Los primeros, alegaron que no lucharon tanto para nuevamente ser esclavos, mientras que los segundos argumentaron que siempre habían vividos sin tener que estar atados a la tierra, por lo que no veían la necesidad de estarlos bajo la nueva situación creada.
El Código Agrario tuvo como propósito principal en la parte Este la distribución de tierras y la eliminación del sistema de los terrenos comuneros, como lo demuestra la ley del 8 de julio de 1824 que afecto considerablemente a los grandes propietarios, incluyendo a la Iglesia que tuvo que observar como partes de sus tierras eran repartidas entre los campesinos.
Boyer, que practico una política de alianza con los hateros confronto serios problemas en la aplicación del Código Rural, ya que estos respondieron organizando una conspiración en Santo Domingo, que fue denominada la conspiración de los Alcarrizos en 1824.
Su propósito no era solo erradicar el gobierno haitiano, sino retornar al país a España, lo que evidentemente constituía un retroceso, por lo que no contó con el respaldo de las masas populares y fue derrotado.
Los hateros, no obstante, continuaron presionando u lograron que Boyer descontinuara las distribuciones de tierras y concertara con ellos una alianza. Estos también se opusieron firmemente a las pretensiones de Boyer den 1826 para que contribuyeran con el pago de impuesto.
La intención era sufragar parte de una deuda que contrajo con Francia tras haber aceptado en 1825 una ordenanza del Rey francés Carlos X que reconoció la independencia de Haiti a cambio del pago de 150 millones de francos en cinco años.
La oposición entonces no fue solo de los hateros, sino también de la clase media urbana y rural, que hasta ese momento le había apoyado, pero que no estaba dispuesta a cargar con los problemas del mandatario haitiano.
El Código fue un rotundo fracaso ya que después de tantos años de practica de la pequeña propiedad y de la libertad del campesino resultaba muy difícil volver al régimen de la plantación y a la servidumbre.
Temiendo que la imposición de nuevas cargas tributarias y la puesta en ejecución en el Este del Código Rural de nuevo levantaran la reacción de los hateros y esta vez con apoyo popular considerable, Boyer planteo a este sector social un entendido en el sentido de renunciar no solamente a la aplicación del Código Rural en la parte antiguamente Española.
También la aplicación de disposiciones de partición de terrenos comuneros y de confiscación de numerosas propiedades de ausentes. En este entendido, sin embargo, Boyer, les dio garantía a los hateros de no proseguir el programa de reparticiones de tierras puesto en practica desde el inicio de su administración en el país.
Esto también fue un rotundo fracaso ya que, si bien los hateros siguieron existiendo y siguieron explotando una población trabajadora bastante importante con el beneplácito de Boyer, no obstante mantuvieron sus hábitos de vida y trabajo arcaicos en sus haciendas.
Esta política de Boyer de alianza con los hateros provoco que la economía no siguiera desarrollándose al mismo ritmo y que incluso, con el tiempo, la parte dominicana fuese afectada por la crisis estructural creciente de la economía haitiana en su conjunto y se crearan de mas en mas condiciones para la independencia dominicana.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
REGRESA